«La salud es un estado de completo bienestar físico mental y social y no solamente la ausencia de afecciones o enfermedades.»
Organización Mundial de la Salud (OMS)
Efectivamente la salud es un estado de equilibrio. Es ser humano es una unidad, un conjunto de sistemas interrelacionados que funcionan armónicamente. Cualquier amenaza sea en el plano físico, emocional o incluso ambiental puede desatar una cadena de reacciones. Y con el tiempo, acaban afectando a la homeostasis de nuestro organismo causando disfunciones y enfermedades.
Las técnicas naturales y manuales son un buen complemento y apoyo para los tratamientos médicos convencionales. Favorecen la respuesta de la persona y mejorar su estado de bienestar. Intentan trabajar de forma holística sobre los factores físicos, mentales y emocionales que afectan a nuestro cuerpo.
Se centran en las causas que provocan la enfermedad más que en sus síntomas tratando de favorecer la armonización de los sistemas funcionales para que puedan restablecer su propio equilibrio.
Muchas de estas técnicas, que han demostrado su eficacia durante siglos, son cada vez mas utilizadas en combinación con las terapias convencionales dentro de la llamada medicina integrativa, tanto para mantener la salud como para mejorarla.